Rusia intenta atribuir a Ucrania la interferencia en las elecciones estadounidenses de 2016

El presidente Donald Trump insistió el viernes en la teoría que apunta a que fue Ucrania el país que intervino en la elección estadounidense de 2016, un día después de que una ex asesora de seguridad de la Casa Blanca la definiera como una “historia ficticia” y asegurara que la misma favorecía a Rusia.
“Rechazo ser parte de un esfuerzo para legitimar una verdad alternativa de que el Gobierno de Ucrania es un adversario de EEUU, y de que Ucrania - y no Rusia - nos atacó en 2016”, dijo la ex asesora principal del presidente Donald Trump para Rusia, Fiona Hill, en su testimonio.
En este sentido, aseguró que “la exitosa campaña de injerencia de Rusia en 2016” para influir en las elecciones que tuvieron lugar ese año, y que ganó Trump, “es evidente hoy en día”, y lamentó que sus efectos sean que la “nación está quebrada” y “la verdad es cuestionada”.
“Esto es exactamente lo que el gobierno ruso estaba deseando -aseveró- que podrían enfrentar un lado de nuestro electorado contra el otro”.
A juicio de Hill, "esas ficciones son dañinas incluso si son usadas solo para propósitos políticos domésticos", por lo que solicitó a los legisladores "no promover falsedades motivadas políticamente que tan claramente favorecen los intereses de Rusia".
Y añadió una nota de alarma: “(Rusia y sus aliados) se han preparado para repetir su interferencia en las elecciones de 2020”, en las que Trump busca la reelección.
Pese a la contundencia del testimonio, el viernes en el programa “Fox & Friends” Trump insistió en su afirmación de que los ucranianos podrían haber penetrado en la red del Comité Nacional Demócrata en 2016 y logrado que Rusia fuera acusada falsamente del delito.
"Entregaron el servidor a CrowdStrike, una compañía que pertenece a un ucraniano muy rico”, dijo Trump. “Todavía quiero ver ese servidor. El FBI nunca ha conseguido ese servidor. Es una parte muy importante de todo esto”, añadió.