SIGUE COMPLICADA

SIGUE COMPLICADA

Luego de que se confirmara la presencia de Lola Latorre en la fiesta y que la producción de Cantando 2020 decidió castigar a la hija de Yanina Latorre con una suspensión de 15 días. A pesar de haber anticipado que sería muy grave para ella quedar fuera del certamen, pareciera que no lleva tan mal sus días de confinamiento.

Lola –que en diversas ocasiones tuvo que salir a hablar en medio de la tormenta por el comportamiento o las declaraciones de sus padres– se convirtió en la protagonista del escándalo. Confinada tras participar en la fiesta clandestina, confesó que no siempre está de buen ánimo. Al contrario, todo indicaría que la joven se destaca por sus cambios de humor.

La misma, aprovecha el tiempo libre para mirar qué está pasando y seguir el minuto a minuto de Cantando 2020(eltrece). De hecho, en la cuenta regresiva para su regreso al show se toma el tiempo necesario para entrenar su garganta: tiene la ilusión de volver a cantar el 16 de noviembre.

En cuanto se conoció la noticia de que Lola Latorre participó en esa fiesta, su familia habló con Fernando Burlando, quien enseguida se convirtió en vocero de la situación. En diálogo con Pampita, el mediático abogado desvió la atención hacia las consecuencias de casi ocho meses de aislamiento en niños y adolescentes.

A pesar de la intención de aclarar las cosas, sigue habiendo versiones cruzadas de la historia. La joven dice que fue a “rescatar” a una amiga, pero todo indicaría que fue parte de la fiesta. De hecho, aparecieron fotos que dan cuenta de de ello.

Pero si bien Lola Latorre es la protagonista, la historia no termina en ella. Según informó Paparazzi, un amigo del dueño del campo donde se realizó la fiesta se comunicó con la redacción de la revista, ofreciendo más fotos que dan cuenta de la presencia de la joven en la reunión clandestina. ¿Cuál es el interés por divulgar esas imágenes? “Soy amigo del que organizó la fiesta y estamos bastante enojados con ella. Sobre todo por cómo mintió y se difundió todo. Dio el nombre del propietario y todo”, explicó el interlocutor, quien prefirió mantener su nombre en reserva.

Lo cierto, es que Yanina explotó acusando a los medios de expresó que si su hija hubiera sido parte de una fiesta habría miles de fotos suyas dando vuelta. Sin embargo, las imágenes se filtraron por el lugar más simple: las redes sociales de sus amigas, que luego del escándalo prefirieron poner candado a sus perfiles.

Mientras tanto, el allegado al dueño del campo insistió en que las fotos existen, pero que no le interesa regalarlas sino que espera recibir una recompensa por ellas. “Son fotos de ella con amigas y otra bailando. Pero no voy a estar regalándolas”, le explicó a Paparazzi. Las pruebas, entonces, existen.

Fuente: Paparazzi.