"Sin policías, a Riquelme lo iban a pasar por encima"

 "Sin policías, a Riquelme lo iban a pasar por encima"

Las imágenes que dejó el caos que se desató en el partido en el que Boca venció a Gimnasia por Copa Argentina mostraron a Juan Román Riquelme, presidente xeneize, impidiendo que los disturbios pasaran a mayores. Sin embargo, para Fernando Peverengo, director de Seguridad en Eventos Masivos de la Santa Fe, la intervención del ídolo boquense sirvió solo por el respaldo policial.

“No conozco a Riquelme, seguro estaba preocupado por lo que les pasaba a los hinchas de Boca. No sé si evaluó el riesgo que corría su integridad física. Seguro colaboró en calmar a los referentes de la barra, no al hincha común. Si no había policías ni Riquelme ni Delgado iban a poder hacer algo, los iban a pasar por encima”, dijo Peverengo en contacto con Alberto Lotuf, en Siempre Juntos, por Cadena 3 Rosario.

Y admitió: “Uno no puede estar conforme cuando hubo incidentes, algo no funcionó como estaba pensado. Entendíamos que 678 efectivos era el número necesario. Estuvieron vinculados a traslados de las delegaciones e hinchadas, más la presencia en el estadio (Coloso Marcelo Bielsa). Adentro había 180 personas de seguridad privada de la organización de la Copa Argentina”.

Reconocemos que hubo erroresEs similar a lo que nos pasó en Central-Peñarol. Acá hay que destacar que el ingreso fue fluido al igual que la salida de la ciudad. En el adentro el espacio de pulmón no fue el necesario”, reconoció, y afirmó que creyeron que no iba a haber desmanes en la platea. “Los plateístas pagaron 40 mil pesos, pensar que alguien que paga eso va a romper una butaca y arrojarla al contrincante...si no había intervención de gente separando no sabemos cómo terminaba”, lamentó.

Peverengo confirmó que el escándalo que se adueñó de un largo rato en el estadio de Newell’s lo “empezaron los de la platea de Boca” y señaló: “Los gritos comenzaron cuando se detuvo el partido, es lo normal. Pero luego se pusieron a arrojarle butacas a los de Gimnasia”.

Por otro lado, el funcionario cuestionó el accionar de la seguridad privada contratada por la organización de la Copa Argentina, responsable de lo que sucede dentro del estadio. “Hay que hacer un replanteo para ver si no debemos hacernos cargo del interior desde la Policía de la provincia. Ellos a las reuniones operativa vienen. Cuando pasan cosas se corren y actúa la Policía. Pedimos las imágenes para identificar al del láser y a los que causaron incidentes”, cerró.