Talleres perdió y terminó tercero

Talleres perdió y terminó tercero

Bajo la lluvia y en una cancha pesada por el agua, Talleres despidió la temporada ante el aliento de su gente en el Estadio Mario Kempes con una agónica e injusta derrota 2 a 1 ante Independiente, por la última fecha de la Liga Profesional, que terminó de simbolizar una comunión con el hincha y para celebrar la clasificación a la Copa Libertadores y para pasar el mal trago de la final de la Copa Argentina perdida entre semana. El resultado final, la caída en el quinto minuto de descuento no opaca lo realizado por el equipo que terminó jugando con muchos  juveniles y dominando el juego.

El partido fue mediocre pero lo mejor fue la entrega y la aceptación y conformidad de un gran semestre, que hizo ilusionar a barrio Jardín, luchando casi hasta el final con las armas limitadas. Pero que así y todo, el equipo del "Cacique" Medina peleó todos los frentes sin complejos quedando cerca de la recompensa. Vale aclarar que el equipo terminó tercero detrás del campeón River y de Defensa y Justicia, que venció a Lanús y se quedó con el segundo lugar. 

El partido fue chato. Independiente golpeó de manera tempranera por el penal de Silvio Romero a los 4 minutos, por la mano involuntaria de Rafael Pérez, que sirvió para darle argumento suficiente al plantel del DT Julio Falcioni de aplicar su táctica favorita. Después con línea de cinco defensores apuntó a cerrarle espacios la dueño de casa que empujado por su gente mostró vocación de ir adelante, pero generalmente equivocando los caminos y a veces, con exceso de individualidad. La más clara fue un remate de Diego García que conjuró Sebastián Sosa, a la postre la figura del partido. 

En esa etapa Talleres perdió a dos hombres por lesiones, como consecuencia de una temporada extenuante y también acusando recibo de lo pesado del césped del Kempes. Valoyes primero y luego Michael Santos dejaron la cancha para darle espacio a un entusiasta David Romero y a un neutralizado Retegui. La lluvia sin dudas impidió el mejor traslado de la pelota y en escenario se acomodó mejor Independiente, que fue inteligente para saber cortar las contras de Talleres, con un Blanco y Lucas Romero como estandartes de la resistencia junto a un concentrado Lasso. Pero la figura fue Sosa sin dudas, que tapó remates de Auzqui de tiro libre y un remate de Méndez que luego encontró al palo de aliado. Fueron dos minutos donde se vistió de héroe (luego llegó un cabezazo de Komar) que lo terminaron de consagrar. 

A esa altura el DT Alexander Medina puso en cancha a los rapiditos Esquivel, Sosa y Ludueña, como para darle un premio al final de la temporada, resignando a los ya cansados Auzqui y Méndez. Los de Avellaneda ya había renunciado hace rato al arco de Guido Herrera y el partido se fue diluyendo entre los intentos estériles de Talleres, a veces más verticales que colectivos y un Velasco que complicaba a cuentagotas. Y en una de las últimas pelotas del juego, un centro de Enzo Díaz sirvió para que un pase de cabeza encontrara a Retegui en el segundo palo para decretar el empate y salvar la noche. Pero no pudo ser porque en el sexto minuto de adición Benavídez se encontró con una pelota sucia en el área ante un Talleres muy expuesto que por ir a buscarlo, terminó pagando esa ambición. 

Fuente: La Nueva Mañana